La osteoporosis significa, literalmente, «hueso poroso», es una enfermedad que disminuye la densidad y calidad de los huesos. En consecuencia, aumenta el riesgo de sufrir fracturas. A medida que los huesos se tornan más porosos y frágiles, el riesgo aumenta considerablemente incluso tras caídas leves durante actividades cotidianas.
La pérdida de hueso se produce silenciosa y progresivamente sin síntomas ni dolores aparentes, hasta que se produce la primera fractura, generalmente, en los huesos de la muñeca, el húmero, la pelvis, la cadera y la columna vertebral. Por esta razón, suele conocerse como la «enfermedad silenciosa».
La osteoporosis es una enfermedad tratable y con la combinación de cambios en el estilo de vida y un tratamiento médico adecuado pueden evitarse numerosas fracturas.
¿Cómo prevenirla?
Realizar ejercicio físico, no fumar, moderar el consumo de sal y consumir un aporte adecuado de calcio, estas son algunas de las recomendaciones para prevenir la osteoporosis.
En el caso de la alimentación, consumir productos lácteos como yogur, queso y leche, entre otros, ayudan a prevenir la osteoporosis, ya que son productos ricos en calcio. Las carnes de pescado son altamente nutritivas y existen algunas que son ricas en Vitamina D, que es muy necesaria para la absorción del calcio diario que se consume.
Una enfermedad frecuente
Se estima que en todo el mundo una persona sufre una fractura ocasionada por esta patología cada tres segundos. Después de los 50 años, una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres sufrirán una fractura en algún momento de sus vidas, indica un estudio de la International Osteoposis Foundation (IOF). En el caso de las mujeres, el riesgo de sufrir una fractura de cadera es mayor que el riesgo de padecer cáncer de mama, de ovario y útero en conjunto.