Adicción al juego digital
Este trastorno mental se caracteriza por un patrón de comportamiento de juego «continuo o recurrente» y, aunque todavía no se ha cerrado la definición, la OMS vincula este nuevo problema a tres condiciones negativas provocadas por el mal uso de los juegos digitales:
- No controlar la conducta de juego en cuando al inicio, frecuencia, intensidad, duración, finalización y contexto en que se juega.
- Al aumento de la prioridad que se otorga a los juegos frente a otros intereses vitales y actividades diarias.
- Al mantenerse la conducta o darse una escalada a pesar de la ocurrencia de consecuencias negativas
La pregunta clave es cómo afecta el tiempo de juego a la actividad del individuo. El trastorno se refiere al uso de juegos digitales o videojuegos, que se puedan utilizar mediante conexión a Internet o sin ella.
La posibilidad de que los videojuegos generen trastornos patológicos (o incluso adicción) ha sido un asunto largamente discutido y este sería el primer paso firme que se da en esta dirección. Si bien muchos hombres de ciencia y organismos han recibido bien esta decisión de la OMS, otros la han puesto en duda.
Uso excesivo de juegos y efectos adversos
Vladimir Poznyak, responsable del Departamento de Salud Mental y Abuso de Sustancias de la OMS, aclara que la mayoría de las personas que juegan videojuegos no sufre ningún trastorno, del mismo modo que la mayoría de las personas que beben alcohol tampoco. Pero hay circunstancias en que el uso excesivo puede generar efectos adversos.
La OMS comenzó a considerar este trastorno hace una década, y tras años de trabajo con profesionales de salud mental, se ha decidido reconocer el desorden oficialmente en su próximo manual de diagnóstico. Pero también hay otros supuestos problemas relacionados con la tecnología como la adicción a los móviles o a internet que, desde su irrupción, han estado siempre presentes en el debate público aunque no tanto entre los expertos.
Tarik Jasarevic, vocero de la OMS, señaló que este trastorno o adicción se da en una “pequeña porción de personas, sin embargo, puede llevar a un trastorno, entendido como un comportamiento adictivo”.
“Las personas que participan en juegos digitales o videojuegos deberían vigilar el tiempo que les dedican, particularmente cuando se puede atribuir a esta actividad el abandono de otras labores diarias, y monitorear cualquier cambio en su salud física o psicológica, así como su funcionamiento social”, añadió Jasarevic.
La inclusión de un trastorno en la Clasificación Internacional de Enfermedades permite a los países tenerlo en cuenta a la hora de tomar decisiones sobre la provisión de cuidados médicos y la designación de recursos para su prevención, tratamiento y rehabilitación.